Pasó... como un fuerte viento de invierno pasó,
como un huracán dejó a su paso destrucción,
nada quedó...
solo vacío y desolación,
temor, dolor.
Perdida en la noche
como un naufrago en la inmensidad del mar
tan sola como esta noche lluviosa y sin estrellas,
tan triste como una guitarra sin cuerdas.
Cada trozo de su corazón
en un bolsillo de su roto pantalón;
ha dejado la esperanza en un baúl.
no sabe si están sus ojos inundados en lagrimas
o solo es la lluvia de noviembre...
Ella muriendo por verlo, por no verlo,
sin saber si todo esta oscuro,
sin saber si las estrellas se apagaron,
o si solo cerró los ojos
para no ver el día que sin él amanece.
No ha visto noche mas oscura que esta noche
triste noche
noche sin luna y sin estrellas
noche fría y sin abrigo.
...Y se pregunta qué le queda,
qué de este absurdo capitulo de su vida
¿nada?...
quedan palabras, tontas palabras
que escribe en un papel para que no se vayan con el viento,
no con el viento de este negro invierno,
palabras no tan tontas,
palabras que brillarán con la magia
de una nueva primavera
si, en el mas bello amanecer
de una alegre primavera,
esa que ya casi no recuerda el frio viento que pasó.
Brezza (02-nov-2008 / 11:12)
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