Me gustan las frescas mañanas,
el canto de las aves
y el sonido de mi guitarra;
me gustan las noches en la playa,
el sonido del mar
y la brisa cuando me abraza.
Me gustan los colores
de un limpio amanecer,
una poesía de Benedetti,
la sonrisa de los niños,
y el jugueteo de mi perro
al atardecer.
Me gusta el aroma de las flores,
una torta de chocolate
y un tulipán.
Un jugo de maracayá en verano,
un kaki en otoño,
y qué mejor en invierno
que un macchiato
en el museo tras un concierto.
Me gusta un Brendenburg de Bach,
un Allegro de Vivaldi,
un latin jazz, y un amarte tanto.
Una mañana de primavera,
una tarde de otoño
y una noche de invierno entre tus brazos.
Me gusta perderme en el tiempo
y olvidarme del reloj;
una canción de Calamaro
y un quizás porque...
Me gusta tu mirada,
me gusta tu risa,
me gusta la música de tus labios,
y el calor de tu abrazo
con la dulzura de un te amo.
Al músico de mi alma
Brezza 23/03/2009

el canto de las aves
y el sonido de mi guitarra;
me gustan las noches en la playa,
el sonido del mar
y la brisa cuando me abraza.
Me gustan los colores
de un limpio amanecer,
una poesía de Benedetti,
la sonrisa de los niños,
y el jugueteo de mi perro
al atardecer.
Me gusta el aroma de las flores,
una torta de chocolate
y un tulipán.
Un jugo de maracayá en verano,
un kaki en otoño,
y qué mejor en invierno
que un macchiato
en el museo tras un concierto.
Me gusta un Brendenburg de Bach,
un Allegro de Vivaldi,
un latin jazz, y un amarte tanto.
Una mañana de primavera,
una tarde de otoño
y una noche de invierno entre tus brazos.
Me gusta perderme en el tiempo
y olvidarme del reloj;
una canción de Calamaro
y un quizás porque...
Me gusta tu mirada,
me gusta tu risa,
me gusta la música de tus labios,
y el calor de tu abrazo
con la dulzura de un te amo.
Al músico de mi alma
Brezza 23/03/2009
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